TÚ Y YO, nos vamos haciendo…

El conocimiento de la historia, las relaciones cercanas, la vida comunitaria, el acompañamiento y la fraternidad nos construyen cada día, nos hacen SER nos llevan a vivir una relación plena del TÚ – YO que nos va haciendo, más aún nos vamos haciendo como dice Benjamín González Buelta, SJ (https://www.youtube.com/watch?v=2jgiIIUpVG4)  y la invitación es a reconocer lo importante y fundamental de vivir nuestra Espiritualidad siendo cercanas más allá de la misión, de la comunidad vivir desde nuestros fundadores desde la entrega y sensibilidad de Gertrudis y Marcos, desde sus sentimientos, sus angustias, sus ideales sus esperanzas, desde su FE que son las que nos acercan al Dios misericordioso que se les acercó en medio del dolor de tantas mujeres explotadas, acercarnos cada día a ellos nos hace SER, vivir con plenitud nuestra entrega e identidad, es común que nos enredemos cada día en trabajos pastorales, en mil y una actividades, en nuevos proyectos, pero si les perdemos de vista y les dejamos de largo los estaremos convirtiendo solamente en un ELLO, en algo, en cosa, es necesario estar y vivir en continua comunicación y acercamiento, Martin Buber dice: “que existimos  y somos en la medida en que nos relacionamos con el otro, por eso cuando el hombre dice YO, quiere decir uno de los dos”, es en nuestra espiritualidad y viviendo fielmente nuestro carisma que crecemos en relación con quien ha sido primero y quienes nos hacen ser las que hoy somos y queremos ser, vivir en la fidelidad no es otra cosa que mantenernos cercanas AL que nos ha convocado y nos amó primero esto nos da la certeza de caminar en relación y plenitud, es a nosotras, Religiosa Filipenses que nos toca vivir en gran relación con el tú de Gertrudis y Marcos y en el TÚ con mayúsculas, el Tú eterno que está presente en nuestras vidas y en nuestra misión para así poder decir con alegría y certeza, cada día ¡SOY COMO SOY Y LO QUE SOY PORQUE ELLOS YA HAN SIDO!, porque ha habido hermanas que han vivido y entregado su vida desde el SER en Él y en ellos.

De tal manera que la invitación es a caminar atentas y sensibles agradeciendo profundamente cada día esta bendita herencia que ha sido cuidada, animada y multiplicada por nuestras hermanas a través de los años y así seguir viviendo desde lo más profundo de nuestra vida la Espiritualidad y nuestro Carisma para que nunca se convierta en un ELLO sino en un TÚ, más aún en un NOSOTRAS que nos lleven al encuentro de los que sufren que nos convocan y nos llevan a Dios y poder ser en Él.

Hna. Mayra R. García Compeán, RF.