“… en la arena, he dejado mi barca, junto a Ti, buscaré otro mar…”

 Me llena de alegría, poder compartir la especial celebración en la que emití los votos perpetuos, acompañada de mi familia y de nuestro párroco en India.

Las palabras de gratitud con las hermanas que han orado en la distancia y con las que estuvieron presentes e hicieron que fuera posible vivir un día inolvidable, lleno de detalles y de manifestaciones de cariño e inmensa generosidad, las transmito cada día en mi oración y pido para que Dios les conceda todas las gracias que necesitan.

A mis hermanas de Colombia, presentes siempre en mi corazón, quiero también agradecer los detalles tan significativos que han tenido y que transmiten su bondad y cariño.

El sentimiento de gratitud y compromiso con Dios y mi Congregación, lo renuevo cada día, y lo siento cada vez más evidente, en la alegría y en la plenitud que embargan mi corazón.

Confío en sus oraciones, para que pueda ser fiel … y que ante las caídas, me levante nuevamente, haciendo presente estos momentos de renovación y gozo, que me hagan recordar siempre el llamado generoso de Dios y de la Congregación que me ha acogido con amor y confianza.