ENCONTRANDO AL SEÑOR EN LAS CALLES DE MADRID

¡BENDITO EL QUE VIENE EN NOMBRE DEL SEÑOR!

Una nueva Semana Santa que el Señor nos regala para centrarnos en nuestra vida y agradecer el mayor gesto de amor de la historia. Dios que se hizo hombre y dio su vida en la cruz por ti y por mí,

Jesús entró triunfante en Jerusalén, el pueblo lo aclamaba y vitoreaba batiendo palmas , exclamando hosannas al Hijo de Dios… para días después ese mismo pueblo alzar la voz pidiendo que le crucificaran.  Podríamos hacer una lectura pobre recordando ese hecho  histórico desligándolo de la repercusión que sigue teniendo hoy día. Pero no con los personajes de antaño, sino con los hombres y mujeres de hoy que lo seguimos crucificando, ignorando, escupiéndole y  maldiciéndole en cada uno de nuestros hermanos.

Ayer fue un día en el que tuvimos la oportunidad de recorrer las calles de Madrid por donde se fueron realizando las  procesiones y orar con tres.

Alegró el alma tanto a los que participaron con devoción y movidos por la fe, como la de los de los que admiraban lo que se estaba haciendo desde su agnosticismo. Pero por encima de todo, el señor se manifestó y en unos y en otros dejó algo para que pudiéramos remontarnos al AMOR.

Que Dios bendiga a cada uno de los miembros de las Cofradías, a los que estuvieron haciendo el montaje  y organizaron todo, a las cadenas televisivas y radiales que lo divulgaron, a cada espectador que de una u otra forma acompañó al Señor a su estilo, a los que quisieron asistir y no pudieron, en fin, que Dios nos bendiga a todos y de manera especial a los costaleros que soportaron todo el peso y el cansancio del camino.

Gracias por haber hecho posible, que pudiéramos encontrarnos con  Dios,  caminando por las calles de Madrid.